Qué gran competencia hay entre los actores de Hollywood. En un mundo tan social, con redes que conectan hasta lo más íntimo de cada estrella, ¿cómo se marca la diferencia? Pues bajando de la galaxia en la que habitualmente se acomodaban los famosos y acercándose a la gente corriente. Para esto era suficiente, hace un par de años, con tener un Twitter y/o Facebook realista y actualizado con frecuencia. Hoy ya no. Hoy eso ya no marca la diferencia.
Así que vamos a ver dos ejemplos de estrellas que, si bien hacen películas de alto presupuesto, son cercanas y queridas, convirtiendo esto en una retroalimentación para poder seguir siendo contratados. Para poder ser un valor seguro. Para mí el mejor ejemplo es Jennifer Lawrence. Y el artículo que describe este "amor social" hacia esta actriz es el siguiente: "10 razones por las que Jennifer Lawrence es sublime". Sí, hace Los Juegos del Hambre, X-Men, etc. Pero hay "algo más".
El otro ejemplo que viene en este post al caso, y que le da título, es Channing Tatum. Se dedica a salvar a la Casa Blanca de terroristas, pero hace cameos en comedias como "Juerga hasta el fin". No es que tenga Twitter, es que es youtuber. 50.000 suscriptores para un actor de Hollywood que se dedica a subir vídeos de su "detrás de las cámaras", y lo que es mejor, hacer parodias de las tendencias de internet. En este caso, el vídeo viral de Jean Claude Van Damme en el que muestra la perfección y precisión de los Volvo:
Y aquí dejo el vídeo de Tatum:
Hay que marcar la diferencia.
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